sábado, 4 de janeiro de 2025

Luciferianismo - Sendero Draconiano - Conjuros


LA ESTRUCTURA DE LOS CONJUROS

Está bien entender el modo en que los conjuros están construidos antes de avanzar hacia los textos que describen los rituales. Esto permite al Iniciado una mayor asimilación del flujo de la ceremonia.

Empezamos definiendo el espacio ritual. Esto se hace por medio de una serie de golpes o repiques de campanilla para aclarar el aire, seguido por un ritual que carga los puntos cardinales con pentagramas mientras se llama a las Deidades Draconianas. La Puerta entre los mundos (otras dimensiones de la Realidad, pero también el puente entre la mente consciente y subconsciente) es abierta.

Las energías Draconianas son convocadas a través de la Puerta, concentradas en un cáliz, cuyos contenidos son ingeridos. El Iniciado Abre el Ojo en el Vacío, es decir, enfoca la consciencia en el gran Exterior, más allá de los límites del Espacio-Tiempo. Esta experiencia les llega naturalmente a los Iniciados que han pasado a través de ciertas experiencias y pruebas, pero puede ser alcanzada por medio de la emulación ritual por aquellos para los que no es una segunda naturaleza. El sigilo de la cabeza a ser evocada (o Dæmon) es descubierto y depositado sobre el altar, y los conjuros son expresados, mientras se estimula a la consciencia hacia un estado de frenético enfoque en un único punto.

Cuando la consciencia de la presencia de la Cabeza se ha conseguido y / o su forma aparece o de algún modo hace notar su presencia; el Iniciado establece su Deseo, cargando la Cabeza con el propósito del Trabajo. La Cabeza es entonces devuelta a su lugar de origen en el Vacío, en donde deberá dar forma a la Realidad y enviar corrientes frescas de manifestación hacia el mundo para realizar la Voluntad del mago. Se cierra la puerta y se aclara el espacio con un segundo rito del pentagrama.


LOS SIGILOS DE LAS CABEZAS

Este grimorio contiene una descripción del aspecto que se espera que tenga la manifestación de cada Cabeza, junto a un conjuro de cada una de ellas, y a un sigilo para realizar dicho conjuro. También hay una página mostrando el Sello de The Apophis Club, el Ojo de Leviatán. Este debe ser copiado y establecido como punto focal durante cada conjuro. Finalmente, hay un rito para invocar a tu Dæmon, cuya ayuda será de gran valor para obtener el éxito con la Magia de las Siete Cabezas, asegurando que obtengas los resultados que más verdaderamente Deseas y Necesitas.

Se recomienda que estudies cuidadosamente todo el grimorio antes de empezar ningún Trabajo práctico e intenta hacer el esfuerzo de aprender los conjuros de memoria en la medida en que te sea posible. Las versiones escritas, de todas formas, deben estar siempre a mano para ayudar en caso de un fallo de memoria. Pero te darás cuenta de que eres capaz de alterar tu estado de consciencia y agitar tus niveles de pasión al máximo más fácilmente si estás hablando de corazón en vez de leer de una página. A continuación se expone un guión paso a paso del conjuro principal.


EL CONJURO

Haz sonar la campana o da golpecitos (nueve veces) De cara hacia el Norte traza (con una varita, daga o con el dedo) un gran Pentagrama en el aire ante ti, empezando en el punto más bajo (el atribuido al Vacío) y moviéndote en el sentido de las agujas del reloj (invocación). El Pentagrama debe visualizarse vívidamente en líneas de luz plateada Dirige tu instrumento (varita, daga o dedo) hacia el centro del Pentagrama que has dibujado e invoca al Nombre de SET. Visualiza al Dios, enorme y sentado en su trono, mirándote desde el norte.

Muévete hacia el sur, en el sentido de las agujas del reloj. Traza un segundo Pentagrama e invoca al Nombre de BABALÓN. Visualiza a la desnuda Diosa con su pelo escarlata y su mirada lasciva observándote. Muevete, de nuevo en el sentido de las agujas del reloj, hacia el oeste. Dibuja un Pentagrama e invoca a LEVIATÁN. Visualiza a una enorme Serpiente enrollada de negras escamas.

Muevete hacia el Este. Traza un pentagrama e invoca el nombre de tu Dæmon, si ya lo sabes. En caso contrario, llámale DÆMON. Visualiza una alada e idealizada versión de ti mismo, ardiendo con energía Divina, mirando hacia ti. Vuélvete al altar, sobre el que estará el Sello del Ojo de Leviatán. Encarándolo, Abre la Puerta. Esto se hace por medio de un gesto decidido, tendiendo un puente entre los Mundos y abriendo el acceso al Vacío. Esto puede ser tan simple como juntar los brazos, cogiéndote las manos y después apartándolos de golpe, como si abrieras unas cortinas. 

Sobre el altar está el cáliz conteniendo un licor rojo, denso y consistente. Puede ser con alcohol (como licor de cereza) o sin él (cualquier zumo de fruta de color rojo). Este representa la Sangre y el Veneno del Dragón mezclados, que ahora son invocados a través de la Puerta hacia el cáliz por medio de repetir el Canto Merlínico del Dragón hasta que sientas que el líquido está cargado: ANÁL NATHRACH, ORTH’ BHÁIS’S BETHAD, DO CHÉL DÉNMHA. (pronunciado ánahl nathrach, orth vas bethod, do chyel dyenvay’ – ‘ch’ es el escoces ‘loch’[1]). Entonces bebe el contenido del cáliz.

Ahora, abre el Ojo en el Vacío. Esto les sucederá fácilmente a los que han Despertado por completo la Cabeza de la Serpiente, pero el resto puede emular la experiencia por medio del recitar apasionado de las siguiente invocaciones (tomadas de Draconian Consciousness): Invoco a Set el Poderoso, el Señor de la Oscuridad, el Principio de la Inteligencia Aislada, que está en su trono en los Cielos del Norte, más allá de la constelación del Muslo[2].

Te arrancaste a Ti mismo de la matriz de tu madre, te agitas con turbulencia como la tormenta en el desierto, sin conocer límites, transgrediendo todas las fronteras, dios de extranjeros y del futuro Desconocido. He hecho mi Voluntad al igual que la Tuya, fortalecida y templada por la Llama Negra, aceptando a mi Yo como mi propio y verdadero Soberano, escogiendo la consciencia por encima de la conformidad.

No es para mí el reconfortante entumecimiento de los credos que conducen a la mente al sueño. Soy de Set, preparado para la batalla, Contienda y Belleza sobre mi bandera. Estoy con Set en la barca de Re, orgulloso en la proa, lanza en mano, mi Voluntad enfocada y dura como el diamante, derribando todo lo que pudiera estar contra mí. Atravesamos los salones de la Noche, El bostezante Vacío ante nosotros emerge enorme, Apep se enrosca ante el Sol, Fauces abiertas, ojos cautivando.

No titubearé cuando la mirada de la Serpiente se encuentre con mis propios ojos y capte la mía. Mi Voluntad permanece firme, mi mente no está atada, atravesaré el hipnotizante hechizo. No me desmoronaré cuando tiemblen los muros Y se extinga la Realidad y se traspase el umbral. Permaneceré erguido en el Vacío Y mi Ojo se Abrirá al Exterior. Leviatán, la Enroscada Serpiente, antes de que los mundos fueran, Tú eras. Cuando todo lo otro No era, Tú eras.

Morando en los lugares Exteriores, Donde el tiempo No es y el espacio está disgregado, donde lo que es, fue y será está entremezclado con aquello que solo es imaginado, aquello que nunca será, lo que podría ser. Donde Nada más hay, Tú eres, eras y has sido siempre. Aquí estoy, Iniciado en los Misterios del Dragón Y yo soy como Tú eres, morador del Vacío. La sangre del Dragón palpita en mis venas; Mis huesos y carne son de Tú sustancia. La chispa vital del fuego del Dragón arde dentro de mi corazón y mente. Manifiéstalo en este mundo, aún hay en mí aquello que está Afuera, aquello que porta la herencia de mi Draconiano abuelo. soy prole del Encorvado Dragón.

Me uno a Mí conmigo mismo, mi mente inflamada con el fuego del Dragón, sostenido en batientes alas coriáceas, cabalgo sobre el aliento del Dragón. Fuera del espacio y oblicuo a través del tiempo cabalgo, todas las posibilidades dando tumbos caóticamente mientras estoy suspendido sobre el borde del Vacío, grandes alas extendidas, agitante cola mientras reflexiono acerca de la Oscuridad última. Miro cara a cara al Abismo durante largos momentos intemporales, aunque ningún tiempo ha pasado y nada es presente. No-esto y No-aquello: Todo es No. Aquí yace Tiamat, enroscada en la Eternidad.

Aunque ni tan sólo es Eternidad, ya que un momento es el mismo momento como el último momento, que No lo fue. Sus Siete Cabezas se agitan en lo Profundo que No es la Profundidad, ojos serpentinos abriéndose de par en par para observar profundo, profundo dentro de mi alma, viéndose Ella misma ahí reflejada. Y veo mi propio ojo, reflejado en los Suyos, Abierto en el Vacío Pronto ese Ojo se abrirá y cuando así sea percibiré que siempre ha estado Abierto, ya que Nada más es.

El Sigilo y la Invocación de la Cabeza a ser evocada (o el Dæmon) son ahora depositados sobre el altar. El mago recita el conjuro preliminar mientras observa fijamente el sigilo. Esto es tal como sigue, compilado a partir de antiguos rituales para invocar a los Demonios del Infierno. Debe ser cantado con pasión, incrementándose hasta el frenesí. Repítelo, cada vez eliminando una de las palabras del principio del conjuro, hasta que finalmente solo una palabra permanezca, concluyendo en un triunfante “¡AZINOMAS!” Al concluir este conjuro genérico inicial, una verdadera sensación de presencia debería ser bastante evidente, aunque probablemente aún sin una forma definida.


XILKA XILKA BESA BESA

BAGAHI LACA BACHABE

LAMAC CAHI ACHABABE

PALAS ARON AZINOMAS


Ahora enfócate intensamente en el sigilo y recita con pasión el Conjuro específico de la Cabeza que deseas evocar. Cuando la Cabeza se manifieste, exprésale tu deseo y di lo que quieres que sea hecho.

Cuando hayas acabado, deja a la Cabeza que parta diciendo, “VUELVE, OH ANTIGUA, AL VACÍO DEL QUE TODAS LAS POSIBILIDADES MANAN, VE EN AMISTAD Y PAZ, PUES YO SOY DE LA MISMA SANGRE QUE EL DRAGÓN.”

Deja a un lado el Conjuro y el Sigilo, entonces Cierra la Puerta, ya sea por medio de juntar tus manos como si cerraras unas cortinas o como se muestra en el vídeo. Encara el norte, dibuja un Pentagrama de destierro (empezando del punto inferior y trazando en el sentido contrario a las agujas del reloj) e invoca de nuevo a SET.

Muévete en sentido contrario al reloj hacia el sur, traza un segundo Pentagrama de destierro e invoca a BABALÓN.

En la misma orientación, ve hacia el oeste, traza un Pentagrama e invoca a LEVIATÁN.

Igualmente, ve hacia el este, traza un nuevo Pentagrama e invoca a tu DÆMON (por su nombre si lo sabes).

Vuelve al altar y repica la campanilla o golpea 9 veces.

Cierra con las palabras, “ASÍ QUEDA HECHO