Hoy, ante Lilith, la amorosa diosa de la Luna Negra, ¡nos disponemos a realizar otro servicio más en alabanza de los Poderes Nocivos! Con nuestros pies descalzos sobre esta tierra denigrada, ¡nos disponemos a gozar extáticamente del amor supremo en que nos envuelve Belial! ¡Dirijamos nuestros pensamientos a la Luna, la bendita estrella de la noche, que nos embriaga con los efluvios que derrama sobre los terrícolas! ¡Que la bendición del Señor de los Infortunios, secundada por las alabadas Fuerzas Oscuras, nos conceda el perfecto cumplimiento de nuestros ritos en este día!
¡Ethan!
