segunda-feira, 1 de janeiro de 2018

PARAMPARA


Es tarea de un sucesor desarrollar el trabajo de su predecesor, y éste es el principio que subyace en la doctrina hindú de parampara, o linaje espiritual. Con frecuencia esto se interpreta en el sentido de que un gran hombre o una gran mujer es sucedido por alguien igualmente ilustrado que amplía el trabajo del ilustre antepasado. No obstante, hay un significado más profundo en esto, y es que cada uno tiene una serie de predecesores y una multitud de sucesores; así la cadena de penetración iniciática es pasada no mediante una sucesión directa de estrechos canales, sino a través de gran número de afluentes que a menudo parecen serpenteantes y rezagados, pero que vistos de forma retrospectiva parecen fluir junto con el curso óptimo que cruza el terreno.

Cada uno toma la inspiración de una variedad de fuentes, las cuales son trigo para moler. Sin embargo, el catalizador que sintetiza esto en una forma coherente es el trabajo práctico que emprendemos en misticismo y magia, mediante los cuales forjamos lazos con lo que suele ser referido como conexiones en los planos internos, inteligencias preterhumanas, fuerzas espirituales, corriente mágica, etc. Esto no quiere decir que estos términos sean equivalentes; lo que hacen es indicar la conexión con algo más profundo que lo que podemos recabar del simple estudio intelectual. Más profundo porque hay una conexión con fuerzas más allá del individuo.

Este principio de parampara puede verse por ejemplo operando en el progreso de Aleister Crowley. Dotado de una mente ágil y con un buen conocimiento de la religión comparada y la mitología, experimentó con una variada cantidad de senderos; y mediante el catalizador de su propia experiencia, sintetizó un único cuerpo de trabajo que, lejos de “venir del cielo” estaba enraizado en el trabajo de otros antes que él. En algunas ocasiones se consideró a sí mismo como que estaba desarrollando la obra de Blavatsky; en otras que estaba restaurando la tradición sumeria. No obstante, siempre fue consciente de que su trabajo derivaba de una gran variedad de fuentes, y que su trabajo a
su vez sería uno entre una gran variedad de piedras con las que otros erigirían sus templos.

Otro ejemplo es Kenneth Grant, que ya era erudito en estas materias cuando encontró por primera vez a Crowley y después a Austin Osman Spare. Basándose en la obra de Crowley, de Spare, de exponentes de Advaida Vedanta tales como Ramana Maharshi, escritores como H. P. Lovecraft y Arthur Machen, su trabajo se fue sintetizando mediante el catalizador de su Logia Nueva Isis, y el resultado es la visión arrolladora e intoxicante articulada en sus Trilogías Tifonianas, su poesía y sus relatos cortos.

No se trata de sugerir que hay algo único en este proceso – que iniciados tales como Crowley, Grant, Spare o Bertiaux han escalado vertiginosas alturas que nosotros no podemos escalar. Al contrario: esta asimilación continua y re-evaluación de la experiencia es algo que pueden hacer todos los iniciados. Sólo de esta forma puede el trabajo continuar.

Éste entonces, es el significado real de parampara.