sábado, 14 de outubro de 2023

La Veneración y Entronización de la Santa Madre

El cultivo de la esencia y la presencia de Nuestra Santa Madre Qalmana a través de su entronización en el altar de Qayin, es un proceso que debe iniciarse en etapas progresivas. Ella es la única que puede compartir el altar con el Maestro y su presencia incluso refuerza y completa sus propias manifestaciones. Pero, antes de que sus fetiches y talismanes físicos puedan ser consagrados y colocados en el altar un contacto astral y espiritual debe ser establecido. Esto se logra a través de la contemplación de su papel relevante dentro de la mitología y el desarrollo de un intenso anhelo de experimentar su santidad, belleza y Luz del Espíritu de fortalecimiento.

Durante este proceso de establecimiento de un contacto consciente con la Santa Madre de Sangre una cantidad de tiempo específico debe ser reservada para su contemplación, meditación y oración después de la entrega de ofrendas al Maestro durante cada Lunes por la noche, también durante las horas de Venus y Saturno en los Viernes por la noche. En relación a estos primeros pasos de su veneración y la búsqueda de sus vínculos dentro y por fuera, nada más que una sola Rosa Roja tiene que ser presentada en el altar como su representación sagrada. Solo incienso adecuado a Venus se quema como una humilde ofrenda y como una llamada que conceda de su fragancia. Esto es todo lo que se requiere y cuando el tiempo sea el adecuado el fiel adorador de la bella sabrá de ella, recibirá su aprobación y su anhelada presencia. Este bendito evento puede ser experimentado en muchas maneras diferentes, pero lo más frecuente son los sueños, presagios y señales concretas de su favorable acogida.

En ese momento un lugar adecuado en el altar se debe crear para ella, en la que solo se colocara un incensario. Un vaso para las ofrendas de flores, una copa para dar y tomar parte de las libaciones, sus Sigilos esotéricos inscritos y pintados en negro y rojo sobre discos de madera, arcilla, cerámica o piedra y un candelabro con una vela roja.

El disco de Sigilos debe ser creado de tal manera que pueda soportar ser ungido con perfumes, tinturas, bebidas y aceites, ya que es a través de esas cosas que se llevan las huellas de sus bendiciones para que el Sigilo en cuestión pueda ser activado.

La vela se limpia primero con agua de Ruda y luego los Sigilos se inscriben verticalmente, de arriba a abajo, a partir del símbolo dentro del doble círculo debajo de la Hoz en el centro del Sello y luego continuando en sentido anti horario, con la inscripción de cada uno de los caracteres en la vela.

La vela es entonces ungida con el aceite de Rosa o Lila y con Invocaciones dirigidas a Qalmana rogando que ella la impregne con su Luz y así hacer que brille a través de su llama.

La vela de Qalmana se enciende después de la séptima repetición de la Formula de llamada y así actúa como punto de una manifestación exterior de su Sangre Ardiente y como tal durante su funcionamiento espiritual se debe percibir con el Ojo de la Mente como una Llama Negra, lo que refleja Su Luz del Espíritu.

El disco de Sigilos dentro de este contexto sirve como un fetiche talismán, después de haber sido ungido y fumigado con Incienso Aromático, como un punto focal, un punto de poder que se coloca debajo de la vela con el fin de seguir el resplandor de Su Santidad.

Esto es más que suficiente como base para su enlace preliminar al altar y a uno mismo para fortalecer tanto los límites internos como los externos a ella.

Después de un tiempo suficiente de esta forma de trabajo simple de veneración y el trabajo con la Santa Madre llega a ser posible que se le dé Trono a su Alma permanente y así crear un mayor enlace a un fragmento de su esencia ilimitada de manera similar a cómo la esencia de la maestría es en concreto conectada a través de los ritos sagrados de nuestro fetichismo.

Con el fin de entronizarla se debe llegar a un entendimiento más profundo sobre su naturaleza y su conexión con el mundo natural para poder determinar los elementos correctos a través de los cuales se establezca un punto de conexión concreto.

Esos puntos de atracción deben ser creados por el camino de la conjunción de los elementos esenciales de plantas, minerales y animales, que a través de los ritos adecuados de la cosecha, la consagración y sacrificio logran empoderar a los baños y tinturas para que actúen como un punto de entrada a su alma y espíritu trascendental incesante.

El enfoque exacto para ese trabajo no se describen en este libro porque Ella, la Velada, no ha querido hacerlo ni se le dio la licencia espiritual al escriba del libro para revelar plenamente estos misterios, pero los que quieran estudiar, practicar y experimentar de la verdad y el poder de todo lo demás que ha sido divulgado tanto en el primer libro y ahora este segundo libro de Falxifer, será capaz de leer entre líneas, a través de la guía del Maestro, la Dama y el Famuli será capaz de encontrar cualquier elemento que falte y finalmente crear las abluciones y tinturas exigidos para la consagración de sus ídolos más sagrados.

La forma de los ídolos debe ser como siempre digna de su belleza y debe tomar las formas relacionadas con la forma astral y mental de su esencia según sea expresada en los trabajos que condujeron a su creación o adquisición. Algunas de las formas más empleadas son las de una mujer hermosa, adornada y coronada de rosas, con una hoz en su mano izquierda, o con una herramienta a sus pies.

En otras ocasiones, para el asentamiento de otros aspectos de su esencia, cráneos fetiche se pueden emplear y dentro de esos entornos los cráneos son a menudo teñidos de color rojo escarlata, perfumados, cargados, coronados en la forma adecuada y por último, después de su consagración completamente velados.

Sea cual sea la forma de estos fetiches siempre deben ser dignos de acuerdo a lo que se está conectado a través de ellos y adorados en consecuencia. Una parte importante de la veneración a los ídolos es su unción con perfumes y aceites sagrados creados y consagrados a su Nombre, que poseen el poder para ampliar su presencia.

Como el asentamiento completo de Qalmana está reservado para aquellos que han recorrido el Camino de Espinas lo suficiente como para observar los destellos del naciente Jardín de las Rosas (el Rosarium de Nod), el principal enfoque de poder de Nuestra Señora se mantendrá a través del empleo de sus Sigilos sagrados ya que poseen la capacidad de llegar a Ella, aun sin haberla entronizado por completo en el altar.