quinta-feira, 21 de setembro de 2023

Gnosis Tifoniana - El Trabajo de la Segunda Cabeza


En el capítulo previo, enfocamos nuestra atención sobre las prácticas relevantes a la primera cabeza del Dragón, particularmente el control y desarrollo del cuerpo físico y la realización de la carne, la sangre y los huesos como intrínsecamente mágicos. De hecho, la carne es el mismo fundamento del Sendero de la Mano Izquierda y todo lo demás debe estar centrado en ella. Como Merlín en Merlin's Wood de Robert Holdstock, nuestras runas deben ser grabadas sobre nuestros huesos. En este capítulo, construiremos sobre el trabajo precedente introduciendo prácticas similares para ejercitar y entrenar las facultades mentales. La mente debe ser monitorizada y llevada bajo control; debe ser expandida y adaptada para adecuarse a nuestros propósitos mágicos.

Nosotros nos hacemos ilusiones sobre que tenemos control sobre nuestras propias mentes. Esta es una afirmación ridícula. Tan pronto como los ejercicios de este capítulo empiecen a ser aplicados conscientemente descubrirás que tu mente es dispersa, fragmentada y no puede permanecer enfocada sobre una cosa durante un simple momento sin duro y riguroso entrenamiento. Desarrollar suficiente control mental para trabajar consisten-temente la magia con éxito es difícil en extremo. Para ilustrar este punto, me gustaría compartir un par de experiencias que tuve cuando estuve muy enfermo en Mayo de 2003.

Mis articulaciones habían sido atacadas por una infección viral que aparentemente había contraído después de haber sido expuesto a orina de rata en el archivo de la compañía en la que trabajaba en aquel momento. Era incapaz de andar, no podía siquiera estar de pie sin la ayuda de bastones y cada momento era una agonía. Mis manos estaban tan agarrotadas e inflamadas que podía hacer muy poco con ellas y tenía un dolor de cabeza que sentía como un taladro perforando dentro de mi sien derecha.

No sorprende que encontrara difícil dormir y que yaciera despierto una noche intentando leer, medio delirante ya que estaba tan enfermo y cansado. El libro que había elegido era una simple novela ligera, nada pesado o demasiado complejo. Sin embargo, cuando la cogí de nuevo por la mañana descubrí que había perdido completamente su trama. En mi delirio, había creado enteramente nuevos personajes que simplemente no existían en la novela. De hecho, estaba tan confuso que no podía decir qué parte había leído y qué parte había imaginado y me vi forzado a empezar la lectura del libro de nuevo. Esto muestra cómo la mente puede liberarse del control consciente y huir con ella misma sin siquiera darse cuenta de lo que está sucediendo. Cuando es apropiadamente entrenada y aplicada, esta habilidad es realmente una herramienta muy importante para las aplicaciones mágicas, pero primero debe ser metida en cintura. Hasta este periodo de enfermedad no había notado la extensión y poder de esta tendencia de la mente.

Pero esta no fue la única experiencia mental extraña que he tenido durante ese periodo. Mientras yacía intentando dormir otra noche, los filtros usuales de mi cerebro debieron de bajarse, permitiéndome un vislumbre del trabajo del subconsciente. A menudo hablamos de “diálogo interno” de la mente ya que constantemente parlotea consigo misma, pero en esta rara ocasión en la que las barreras cayeron fui capaz de ver realmente cuán grande es. Me hice consciente de que mi mente estaba teniendo al menos una docena de conversaciones simultáneas consigo misma como había observado, todas ellas divorciadas de la participación consciente. ¿Sabes cuando te sientas solo en un bar o cafetería concurridos y simplemente escuchas el rumos de las personas que te rodean? ¿En el que las conversaciones son todas distintas, pero el ruido general es tan alto que eres incapaz de sintonizar completamente con ninguna de ellas y aislarla? Fue como eso, ¡pero estaba dentro de mi cabeza y llegué a la toma de consciencia impactante de que siempre era así! Pero el cerebro está acostumbrado a filtrar aparte aquellos trozos que no son pertinente para el interés actual de la mente consciente, por lo que es arrogante y bastante absurdo asumir que se está bajo control. De hecho, realmente somos engañados y manipulados por los filtros programados que nuestra sociedad y educación han condicionado en nuestras mentes. Es la tarea del mago deshacer este condicionamiento y liberar los recursos de toda la mente, integrándolos y unificándolos. Pero primero, es necesario volverse empíricamente conscientes de ellos y familiarizarse con los mismos lo cual no es una tarea fácil. Es esta tarea la que dirigiremos en el capítulo presente.


Modelos del Alma

Con el fin de entrenar la mente en el trabajo mágico, es necesario entender la estructura y substancia subyacente de la mente. Las palabras “mente”, “alma”, “espíritu” y parecidas son muy vagas e imprecisas y sería de beneficio para el Iniciado dedicar algún tiempo a aprender las interrelaciones implicadas en alguno de los más sofisticados modelos del complejo cuerpo-mente- alma.

La mayoría de tradiciones mágicas enseñan un conocimiento del alma como parte de su currículum. El modelo Egipcio del alma y sus varias partes es aludido en el Templo de Set, especialmente bien definido por Don Webb, y este puede ser familiar para algunos; si no, entonces sus libros publicados contienen una buena porción de la información más pertinente. El modelo del alma Germánico es bien conocido a través de los libros de Edred Thorsson, más particularmente Runelore y The Nine Doors of Midgard. El análogo modelo Celta es presentado en mi Book of Ogham. Un altamente desarrollado modelo Cabalístico existe dentro del los Papeles de Conocimiento de la Orden Hermética de la Golden Dawn. No hay escasez de modelos sofisticados de la psique dentro de las tradiciones mágicas. El conocimiento psicológico más reciente también será de uso para el Iniciado, especialmente las obras de Carl Jung. Para cocinar todos estos modelos hasta sus fundamentos y presentar un inventario de las distintas partes del alma en un Inglés moderno en ningún orden particular, podemos crear una lista que se leería un poco como la que sigue:


intelecto

memoria

emociones

aspectos de la sombra reprimidos

características heredadas

imagen idealizada

faceta pública

proyección tutelar

sombra post-mortem

centro focal, el sentido de Yo en sí mismo


El propósito de la Iniciación es tejer estas facultades dentro de una simple identidad cohesiva, capaz de sobrevivir a la muerte del vehículo físico y Remanifestarse en una nueva existencia, sea en forma carnal o incorpórea. Antes de que ellos puedan ser integrados, deben ser entendidos y desarrollados y saneados. Muchas de estas facultades ordinariamente se comportan conforme a condicionamientos programados, algunos sociales, algunos biológicos, algunos simplemente por hábito. Usando las misma técnicas de observación, puesta a prueba y despliegue que fueron aplicadas a los cinco sentidos bajo el trabajo de la primera cabeza, debemos ahora llevar las partes de la psique dentro del completo orden de trabajo. Esto necesita práctica y paciencia y una gran cantidad de trabajo duro. Recomendaría que el Iniciado debiera estar familiarizado con tantos de estos modelos del alma como sea posible y trabajar con ellos vigorosamente dentro del contexto de su propia tradición simbólica y cultural. Cada modelo tradicional es equilibrado en sí mismo y tomándose el tiempo para absorber completamente cada uno por turnos, sobre sus propios términos y en sus propios marcos de referencia, el Iniciado pronto establecerá una imagen muy cohesiva de sus operaciones internas, algo que será crítico para el trabajo de la segunda cabeza.


Monitorizando el Pensamiento

Antes incluso de que podamos intentar controlar nuestros pensamientos, primeramente es necesario hacerse consciente de ellos. Para este ejercicio, que debería ser practicado regularmente por al menos un mes antes de progresar a cualesquiera de las otras prácticas que siguen, asume la postura sentada del Dios como es descrita bajo el trabajo de la primera cabeza.

Una vez la postura sea fija y estable y la respiración se haya establecido en un ritmo fácil, simplemente empieza a observar tus pensamientos. Centra tu consciencia en un tipo de “punto aventajado” dentro de tu cabeza y sólo mantente observando. Toma nota de tus pensamientos conforme surgen. No te permitas involucrarte en cualquiera de ellos, sólo obsérvalos conforme surgen, se multiplican y desvanecen.

Después de un tiempo te harás consciente de insidiosos pensamientos “ocultos” que se arrastran hasta llegar a ser dentro de tu mismo punto mental aventajado. Estos serán pensamientos tales como: “Estoy maravillado de lo bien que lo estoy haciendo”, “¿Cuánto quedará para que termine el ejercicio de hoy?”; “Hmm, ¿de dónde vino ese pensamiento?”, y cosas así. Puede ser difícil inicialmente notar los pensamientos de este tipo, ya que se disfrazan a sí mismos como parte de tu proceso de observación. Pero no lo son, son pensamientos separados y distintos por propio derecho y deberías reconocerlos como a tales.

Una vez hayas dedicado un tiempo a la práctica regular y te hayas familiarizado con los patrones de tus pensamientos como son vistos desde tu punto interior aventajado, puedes llevar el ejercicio un paso más hacia delante. Ahora deberías permitir que tu atención se aferre a un pensamiento cuando surja y seguirlo con exclusión de todos los demás. Debes intentar no influirlo o desarrollarlo de ninguna manera; sólo obsérvalo y sus circunvoluciones perfectamente desapasionadamente. Descu-brirás que los diferentes flujos de pensamiento reaccionarán a dicha observación tan de cerca de diferentes formas: algunos se secarán y cesarán casi instantáneamente; algunos se desarrollarán a un ritmo constante, algunos saltarán de idea en idea, mutando y cambiando en el parpadeo de un ojo; algunos parecerán extrañamente pararse, girarse y mirarte justo a ti. Una vez más, practica esto sobre una base regular.

Finalmente, guarda nota de tus progresos con estos ejercicios y anímate siempre. Cada minuto dedicado en dicha práctica es un triunfo de tu Voluntad, incluso si ningún signo obvio de mejoramiento parezca hacerse notar. Si continuas animándote, tu mente subconsciente responderá y empezará a participar, abriéndose más fácilmente a tu inspección conforme sienta que estás satisfecho con ella y que hay placer por ganar en estas prácticas; el subconsciente responde mejor a la diversión en tales ejercicios a largo tiempo, así que haz un juego de ellos. Acosándolo producirá resultados pobres y resentidos; intenta implicarlo y agradece su participación.


Parar el Pensamiento

Una vez te hayas vuelto eficiente en la observación y seguimiento de tus trenes de pensamiento sin interferir en ellos, descubrirás que has ganado algo de intuición en el fenómeno del pensamiento en sí mismo. Empezarás a reconocer los patrones a través de los cuales los pensamientos aleatorios surgen en tu mente, subiendo a la superficie desde las profundidades del subconsciente. Ahora, armado con este conocimiento, encaramos la tarea considerablemente más difícil de amortiguar y aquietar realmente los pensamientos, evitando que surjan en primer lugar donde sea posible y cortando rápidamente aquellos que consigan resbalarse a través de la red.

Esto se hace de la misma manera que el ejercicio anterior. Centra tu consciencia dentro de tu mente y empieza a observar. Pero esta vez mantén tu paisaje mental tan quieto y vacío como puedas posiblemente hacerlo. Tan pronto como te hagas consciente de un atisbo de pensamiento, extínguelo. Ahora la batalla empezará en serio. Te asombrarás de cuán indisciplinada es tu mente, no te creerás cuántos pensamientos zumbarán a tu alrededor y resistirán tus esfuerzos por acallarlos.

Parecerán como la hidra: cortas uno y dos más surgen en su lugar. Te desesperarás por el pequeño progreso que te parecerá que estás haciendo. Te engañarás pensando para ti mismo, “Lo estoy haciendo realmente bien, no he tenido ni un sólo pensamiento en todo el tiempo,” para sólo darte cuenta cuán insidiosos son los pequeños bastardos empatando a tu propia vigilancia y tentándola a pensar. Se reirán de ti, te imitarán, bailarán en círculos a tu alrededor. ¿Quieres saber lo mejor de todo? Ríe con ellos, no te estreses. Tu subconsciente cesará de rebelarse y empezará eventualmente a trabajar contigo si lo convences de que no eres su enemigo y que su cooperación beneficiará a todo tu Ser.

Puede parecer descorazonador decir que después de mucho trabajo y práctica puedes encontrarte siendo capaz de cesar verdaderamente de pensar por unos meros tres o cuatro segundos. Pero esto es un logro verdaderamente increíble y la sensación de puro Yo que surgirá en estos momentos es – bastante literalmente – como un buen orgasmo. Considera que un orgasmo tiende a durar sólo segundos, pero eso no hace que las personas no luchen por él. Este grado de control mental será de tremendo valor en los trabajos mágicos de las cabezas posteriores, especialmente en la manipulación temporal de la sexta cabeza. Pero necesitarás practicar, y a menudo.


En Un Solo Punto

Una vez seas capaz de aquietar exitosamente tus pensamientos por unos breves segundos (lo cual es la Clave a la gnosis mágica y los poderes proféticos), es tiempo de empezar a enfocarse en la concentración en un solo punto, que es una disciplina relacionada y análogamente difícil.

Empieza a mirar directamente a un solo punto fijo. Puede ser una marca sobre la pared; puede ser un punto sobre un trozo de papel en blanco; puede ser el filo de un cuchillo (muy tradicional); puede ser la cabeza de un alfiler, puede ser cualesquiera de cientos de pequeñas y simples cosas. Lleva tu mente exclusivamente a tu punto elegido de enfoque. No permitas que otros pensamientos o impresiones surjan en tu cerebro.

Esto será endemoniadamente difícil de la misma y exacta forma en que el pensamiento vacío del ejercicio previo fue endemoniadamente difícil. Tu mente se retorcerá y girará en su lucha por escapar de tu punto de concentración. Pensamientos tránsfugas surgirán más rápido de lo que puedas acallarlos, encontrarás tu mente deambulando, distraída por la cosa más trivial. Nada de esto importa, sólo vuelve deliberadamente tu atención a tu punto de enfoque elegido. La cuestión en esta fase no es cuán exitoso eres, simplemente es el hecho de que estás practicando. Esta práctica inevitablemente mejorará tu habilidad con el tiempo. Cada ligera mejora en los poderes de concentración mágica y Voluntad aplicada que ahora estás deliberadamente afinando, aportará enormes dividendos. La falta de práctica, por supuesto, no aportará nada en absoluto.


Ejercicios de Visualización

Una vez hayas adquirido el truco de concentrarte sobre un punto sin sufrir distracciones indebidas, puedes empezar a hacer la práctica más mágicamente útil enfocando tu recién encontrada atención, sobre un objeto visualizado en lugar de uno material. Empieza visualizando algún objeto diario con ningún significado esotérico. Sostén su imagen fija en el ojo de tu mente. Imagina cada aspecto de su apariencia en las tres dimensiones y mantenlo firmemente en tu imaginación, tu concentración rígidamente fija sobre él. Conforme ganes facilidad y confianza, empieza a girar y rotar el objeto dentro del ojo de tu mente, viéndolo desde todos los ángulos. Finalmente, introduce los otros cuatro sentidos en tu visualización e imagina el objeto en toda su gloria sensual.

Un buen objeto a elegir inicialmente sería una pequeña pieza de fruta tal como una mandarina o un fresón. Estas son formas simples, pero son coloridas y ricas en texturas y ofrecen una completa fiesta sensual cuando el ejercicio es practicado con su completo potencial. Imagina el olor dulce de la fruta; los ligeros hoyuelos sobre su superficie conforme la tocas; el apetitoso sabor; el pulposo, blando sonido mientras es apretada.

Finalmente, empieza a practicar visualizando símbolos mágicos o sigilos que sean significativos para ti (no juegues en esta fase con los que no conozcas el significado, ese tipo de trabajo pertenece a la tercera cabeza, no a la segunda). Usa color, forma, etc., en tus visualizaciones y de nuevo intenta agarrar el símbolo en tres dimensiones. Esta práctica tendrá directa aplicación mágica en el trabajo de la tercera cabeza. Sin embargo, en el presente a ninguna intuición o lo que pueda surgir le será dada la bienvenida; de hecho, será evidencia de que no estás concentrándote lo bastante duro sobre la tarea entre manos, que es enfocarte en un solo punto sobre un objeto visualizado con ninguna distracción.

Cuando hayas logrado triunfar con las visualizaciones estáticas, empezarás a visualizar escenas completas desarro-llándose a tu alrededor. Lee un pasaje de un libro y recréalo con meticuloso detalle dentro de tu imaginación. Camina y observa la escena desde todos los ángulos, examina los personajes y los objetos en su mundo. De nuevo, ejercita los cinco sentidos: coge cosas y acarícialas; escucha los sonidos del escenario; saborea las cosas; huele el aire para descubrir qué olores puedes detectar. Lleva a cabo este ejercicio muchas veces en muchos escenarios diferentes hasta que parezcan “reales”. Esta práctica también se traducirá en trabajo mágico directo en la próxima cabeza, lo cual se demostraría bastante difícil si esta experiencia y pericia previas no hubieran sido ganadas a través del duro trabajo.


Mantras

Otra forma de enfocar la mente es el canto de mantras. Un mantra es una palabra que es repetida una y otra vez, capturando la mente con su ritmo y evitando que la atención deambule. Por supuesto, si esto fuera todo, podríamos también recitar “¡María tenía un pequeño cordero..!

Ahora en realidad, esa es una brillante idea y sugeriría que los Iniciados deberían de hecho empezar su práctica de mantra recitando ritmos infantiles o cancioncillas. De esta forma, puedes olvidarte de cualquier significado esotérico y simplemente enfocarte en envolver tu atención en el ritmo del mantra. Después, cuando la pericia haya sido ganada y el trance mágico pueda ser fácilmente conseguido a través del uso del mantra, mantras más significativos podrán ser usados para propósitos mágicos positivos, urdiendo el mundo a través de su repetición.

El mantra debería ser tarareado, cantado o vibrado, no simplemente murmurado bajo la respiración. El tono exacto y duración dependerán del mantra elegido. Algunos trabajan mejor con un zumbido de abeja; otros con un fuerte, explosivo susurro; aún otros con un profundo, sonoro encantamiento. La respiración debería ser regulada para adecuarse al mantra, que debería ser entonado en alto inicialmente. Conforme la repetición del mantra empiece a operar en “piloto automático”, conduciendo el pensamiento con él, puede ser gradualmente acallado hasta que sea repetido silenciosamente dentro de la mente, como una rueda giratoria de sonido interior que mantiene la mente embelesada.

Una vez este trance pueda ser establecido fácilmente, el Iniciado estará preparado para empezar a usar mantras con significado mágico. Un mantra girando en la mente induce un estado de trance y abre las puertas entre las mentes consciente y subconsciente. Puede por lo tanto ser usado para plantar semillas mágicas en la mente profunda para propósitos operativos o de iluminación. Algunos mantras mágicos sugeridos son:

La Fórmula del Æon de Set: “Xepera Xeper Xeperu”

La Fórmula de Leviatán: “Xeper y Remanifest”

Para buscar los Misterios: “¡Reyn til Runa!”

Para abrir las Puertas del Infierno: “Zazas Zazas Nasatanada Zazas”

La Palabra del Æon de Horus: “Abrahadabra”

Para convocar la corriente Draconiana: “Capimao Vovim”

Las fuerzas combinadas del Señor de la Oscuridad y la Serpiente: “Apepi Set”

El Encantamiento de la Creación: “Anadl Natuiaeth UfuddDod Bedd Oedd Doeth Ni Fyny Fel”

“Yo reino sobre ti...”: “Ol sonf vors g”

El Secreto susurro de Apep: “TINAMIWYAN”

Métodos avanzados de desarrollo de mantras para propósitos mágicos operativos serán discutidos en la sección “Sigilos” posteriormente en este capítulo.